Enófilas contra o pensamento único

En El País, publican unha entrevista con Alice Feiring, a contragurú do viño:

Alice Feiring insiste en decir que es “pequeña y tímida”. Lo de menuda salta a la vista lo mismo que el rojo de su pelo, pero la timidez es dudosa a juzgar por la revolución enológica que enarbola la escritora neoyorquina. “Seré tímida, pero cuando tengo una opinión la digo”, confirma de su lucha contra la tiranía que reina en el mundo del vino desde que el famoso crítico Robert M. Parker, calificado como “el mejor catador de vinos del mundo”, impuso sus gustos con el sistema de puntos que utiliza en la revista Wine Spectator.

“Estoy cansada de no encontrar los vinos que me gustaban”, protesta Feiring. “De que el gusto de una persona haya borrado todo lo anterior. De ir a Bilbao y, como digo en mi libro, no encontrar qué beber porque todo sabe igual”, asegura con esa rebeldía susurrante tan suya.

…e no seu blog, Veritas in Vino, a Feiring pregúntase por que España está tan interesada nela despois desta aparición en El País e outra previa en Sibaritas:

Might it be that more Spaniards than we think are upset with the change in their wines? Are they fed up with the modernization and bent towards Big and Bold and Clunky? From what I can see total areas of the country have been wiped out with modernization and machinations and a love for scores.

Permítanme a miña teoría a esta pregunta: Alice Feiring desempeña un fértil papel neste escenario teatral das vaidades enolóxicas. Alice Feiring é necesaria.

One Comment

  1. 15 / Setembro/ 2008

    Por certo, Parker non puntúa na Wine Spectator, senón na Wine Advocate.

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